Tengo que admitir que las veces que he ido a una entrevista de trabajo se pueden contar con una mano; aún así han sido experiencias muy agradables y únicas.
La penúltima entrevista fue en el año 2003, para formar parte de una empresa nueva en el mercado turístico. Lo curioso fue que lo que me explicaron sobre su proyecto empresarial (que era muy interesante y diferente), apenas tenía que ver con lo que la empresa llego a ser, quizás porque el mercado no estaba preparado para tanta novedad en aquel momento. Esta interesante entrevista con los dos directores dio también pie a mi siguiente entrevista de trabajo, a mi última entrevista, ya que me preguntaron si me podrían recomendar para realizar otro puesto en una empresa colaboradora suya en aquel momento.
Seguramente podría haber ido más preparada a la entrevista, siempre hay algo para mejorar, pero creo que conseguí cuidar bastante los detalles como la vestimenta y tener el C.V. preparado; de hecho para la siguiente entrevista ya se lo había mandado antes. También es importante documentarse bien sobre la empresa antes de la entrevista para demostrar tu conocimiento e interés en el asunto, aunque esto es una tarea difícil cuando se trata de una empresa recién formada. Además se te plantean un montón de preguntas, que se van incrementando a medida que trascurre la entrevista, y en especial a raíz de otras respuestas. Tengo que admitir que de estas dos entrevistas salí por supuesto muy satisfecha, además fue una experiencia muy gratificante, poder formar parte de dos grandes empresas al mismo tiempo; actualmente me encuentro trabajando con la segunda empresa.
Es difícil recordar con detalle experiencias desde hace más de 14 años. Aún así me acuerdo que estaba muy nerviosa, quizás por inseguridad o porque me encontraba en un terreno desconocido, no lo sé, en todo caso fue una experiencia interesante. Tres años más tarde, tuve otra entrevista, en el mismo sector, en el sector hostelero, pero entonces estaba más preparada, con más autoconfianza, con experiencia, y porque sabía que poseía las capacidades y cualidades necesarias para empeñar bien dicho trabajo.
Por supuesto, te hacen muchas preguntas sobre tu vida, formación, experiencias, aficiones, pero si estás seguro de ti mismo (NO PRESUMIDO), y además dices la verdad, no tendrás problemas. Es importante documentarse bien sobre la empresa antes de la entrevista y realizar preguntas que demuestren ese conocimiento, porqué la información que recibes puede ayudarte a decidir si el puesto de trabajo realmente es lo que te interesa. Pero ten en cuenta que estás en un territorio ajeno, donde estás siendo observado/-a. Por lo tanto es importante comportarse bien, porque cualquier comunicación sea verbal o no transmite algo.
Vístete con sencillez, con elegancia y estilo, que muestre firmeza y madurez, y un consejo que aprendí hace poco de Eugenio Mohallem, pon tu mejor pieza primero y luego de menos a más, es decir no del 1-10 sino primero el 10 y luego 1-9. Aplícalo a cualquier parte de tu C.V. sea formación, puestos de trabajo, piezas gráficas, etc. No olvides:
SIEMPRE PRIMERO LO QUE MÁS LLAMA LA ATENCIÓN.
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